Publicado el: 15/04/19

UN GRUPO DE VEHÍCULOS MAZDA – IMPULSADOS POR MOTORES DE DIESEL LIMPIO – Y CICLISTAS ENTUSIASTAS, SE UNIERON PARA CREAR UNA EXPERIENCIA EXCLUSIVA: UN RECORRIDO DE 70 KM EN BICICLETA EN UNA DE LA CIUDADES MÁS BELLAS DEL MUNDO, HIROSHIMA, CIUDAD NATAL DE MAZDA. CONTINÚA LEYENDO ESTÁ INCREÍBLE HISTORIA.


Un grupo de vehículos Mazda – impulsados por motores de Diesel Limpio – se unieron a ciclistas entusiastas en un evento organizado por Masaihiko Kifune, un ciclista profesional de origen japonés quien participó en la primavera de 2015, en el Setouchi Shimanami Kaido Expressway.

 

“Shimanami Kaido”, conocida oficialmente como la autopista de Nishiseto, es una carretera en la isla de Shikoku que conecta a la ciudad de Onomichi en la Prefectura de Hiroshima, con la ciudad de Imabari en la Prefectura de Ehime. La vía, con más de 70 kilómetros unidireccionales y 10 puentes, sirve como una pista de carreras para los ciclistas. Desde que finalizó su construcción en 2006, el lugar ha sido visitado por corredores de todo el mundo y ahora es considerado como la Meca de los ciclistas. Para permitir que disfrutaran de la autopista, la emoción por la conducción y la belleza de Hiroshima, ciudad natal de Mazda, se trabajó con los organizadores del evento para crear una exclusiva experiencia: un viaje en bicicleta de Onomichi a Imabari y de regreso, celebramos el manejo en autos Mazda alimentados por Diesel Limpio.


El día del evento resultó ser perfecto para el ciclismo.

 

En total 22 personas viajaron en sus bicicletas desde Onomichi a Imabari, degustando las delicias culinarias que iban encontrando en el camino y pasando por el segundo puente atirantado más grande del mundo, el puente Tatara; una vía con una impresionante vista al Mar Interior de Seto.

 

El clímax del recorrido fue el puente Kurushima-Kaikyo: el primer puente triple suspendido y el más largo del mundo (4,105 metros).

 

Adicional a la espectacular vista, la experiencia altamente gratificante y satisfactoria conmovió a algunos ciclistas hasta las lágrimas cuando el recorrido en Imabari finalizó.

En el camino de regreso hacia Onomichi, los ciclistas cambiaron de engranaje y se sentaron detrás de las ruedas de un Mazda 2, Mazda 6, la Mazda CX-3 y la Mazda CX-5, todos impulsados por un motor de Diesel Limpio. El regreso inició con una conferencia impartida por el personal de Mazda acerca de la importancia que tiene la postura al conducir, lo cual es esencial para que los conductores disfruten del manejo y la filosofía de Mazda: Jimba Ittai. Plenamente conscientes de la importancia que tiene la postura al conducir, los ciclistas comenzaron a entrar en calor. La conferencia fue seguida por una evaluación de los ángulos ideales de articulación usando un transportador gigante, instrumento secreto de Mazda, antes de permitirles conducir sus vehículos. Durante los 70 kilómetros de regreso, todos los ciclistas mantuvieron una posición ideal sumergiéndose en el emocionante y estimulante rendimiento que se siente al conducir un Mazda impulsado por un motor de Diesel Limpio.

 

El evento resultó ser una valiosa oportunidad para Mazda, una empresa de coches arraigada en Hiroshima, comprometida con aquellos que buscan celebrar el manejo y obtener algo más que solo conducción.